Hoy miércoles 9 de abril, desde las 18:00 a 20:00 hrs aproximadamente, estaremos realizando trabajos de mantención en nuestro Seguro Obligatorio SOAP.
Provisoriamente para retomar la cotización de Auto Click Comercial, debes buscarla en la bitácora de cotización y póliza comercial.
SEGUROS
Contáctanos en:
Es momento de cuidar nuestra salud física. Llevar una rutina saludable impacta de manera directa en la calidad de vida, pues contribuye a mantener un ambiente general de bienestar para ti y para quienes te rodean. A continuación te dejamos una serie de recomendaciones para trabajar la salud física en tu vida diaria.
Tener una alimentación saludable y balanceada, practicar actividad física con regularidad, descansar lo suficiente y controlar el estrés, son las claves para mantener en buenas condiciones el sistema inmune.
La mejor alimentación es aquella que se lleva de manera equilibrada y se combina con un estilo de vida saludable. Si incluyes ciertos alimentos en tu plan nutricional, estarás ayudando a que tu sistema inmune pueda defenderse frente a los agentes externos que puedan afectarlo.
Según expertos en nutrición, los alimentos que se deben consumir a diario son: frutas (una porción al día) y verduras; aceite de oliva u otras fuentes de grasas saludables como el aguacate o los frutos secos, cereales integrales y lácteossi eres tolerante a ellos.
También se recomienda alternar con frecuencia semanal las proteínas de origen animal como pescados, carnes blancas, carnes rojas (en menor proporción) y huevos; y de origen vegetal como quinoa, lentejas o garbanzos.
Es la defensa natural del cuerpo contra las infecciones. Está compuesto por células, tejidos y órganos especializados, lo que lo hace capaz de reconocer millones de microbios diferentes y de destruir con eficacia los cuerpos extraños que lleguen al organismo.
A través de una reacción bien organizada, el cuerpo ataca y destruye los organismos infecciosos que lo invaden como bacterias, virus, parásitos y hongos. En ese sentido, una dieta rica en vitaminas y minerales fortalece el sistema inmune y lo ayuda a mantener su capacidad protectora.
Proteínas: son uno de los tres macronutrientes que necesita nuestro organismo para funcionar correctamente (junto con las grasas y los carbohidratos). Las proteínas ayudan a la formación de células y tejidos, y están presentes en carnes rojas, pollo, pescado, huevo, lácteos y en los alimentos vegetales como la soja y la quinoa, entre otros.
Vitamina C: es un micronutriente cuyas funciones principales tienen que ver con la formación de vasos sanguíneos, cartílagos, músculos y colágeno en los huesos. También es un antioxidante que protege al cuerpo frente a los radicales libres y ayuda a la absorción del hierro. Frutos como el limón, la naranja, la mandarina, el kiwi, las frutillas, el pimiento rojo y las verduras de hoja verde contienen vitamina C.
Vitamina E: también tiene propiedades antioxidantes, ayuda a la visión y a la salud en la sangre, el cerebro y la piel. Alimentos como pescados grasos (salmón o atún), aceites de oliva y canola, frutos secos (en las porciones indicadas por un profesional), aceitunas y palta contienen este micronutriente.
Probióticos: estos microorganismos ayudan a combatir las bacterias patógenas y mejorar la función intestinal. Se encuentran en los alimentos fermentados como yogures con probióticos, kéfir, chucrut y kombucha.
Oligoelementos: son minerales que el cuerpo necesita en pequeñas cantidades, pero que cumplen con funciones determinantes en el organismo. Se encuentran en las carnes rojas, algunos pescados, los cereales y las legumbres. Algunos son:
- Zinc: contribuye a la división y crecimiento de las células. También ayuda al metabolismo de los carbohidratos y a la cicatrización. - Selenio: importante en la producción de enzimas antioxidantes. - Hierro: contribuye a la formación de células y proteínas, y al transporte y almacenamiento del oxígeno en el organismo. - Cobre: compone una serie de enzimas conocidas como cuproenzimas y participa en el desarrollo y mantenimiento de las funciones del sistema inmune.
Recuerda que mantener un plan nutricional en el que incluyas todos los grupos alimenticios de manera balanceada y acorde con tus requerimientos, es la clave para mantenerte saludable y combatir adecuadamente algunas enfermedades en caso de que aparezcan. Finalmente, mantente bien hidratado y evita los alimentos ultraprocesados, el exceso de azúcares añadidos, los productos con grasas saturadas y los que tienen alto contenido de sal.
En tiempos de aislamiento social, el equilibrio en cada una de las actividades que realizamos es fundamental y una de los factores que no podemos descuidar es nuestra salud visual. Te damos algunas recomendaciones para que tus ojos no terminen afectados por el incremento de algunas actividades cotidianas.
Uno de los sentidos que más utilizamos a diario es el de la vista. Gracias a este las diferentes acciones que realizamos se llevan a cabo de forma más cómoda y eficaz.
Pero, la contingencia actual nos ha llevado a disfrutar de este sentido más allá de lo habitual: vemos más televisión, miramos más el celular y estamos en el computador hasta altas horas de la noche. Consultamos al médico Juan David Bedoya, y estas fueron algunas recomendaciones que nos hizo.
¿Cuánto tiempo paso al frente de una pantalla? Si disfrutas mucho estar al frente de una pantalla de televisión o de tu celular recuerda hacer algunas pausas para enfocar tu mirada en otros lugares, revisa que el brillo no sea el más alto y utiliza los modos nocturnos que traen algunos dispositivos si tu lectura la realizas luego de las 7 de la noche.
¿Dónde ubicar las pantallas para evitar la fatiga ocular? Los sitios ideales para las pantallas son los ambientes con mayor luz natural. Adicional a esto, la distancia entre la pantalla y las personas es relevante pues entre más retirados estemos de su brillo menor será el impacto en nuestros ojos.
Los ojos trabajan por jornadas. La Organización de Institutos Nacionales de la Salud (INS) ha hecho una recomendación que aplica en tiempos de teletrabajo y cuarentena: si pasas más de 20 minutos al frente de su computador no olvides parpadear frecuentemente, esto ayudará a que los lagrimales de tus ojos permanezcan activos y reducirá la fatiga ocular.
No mirar durante mucho tiempo a un mismo lugar. Tal y como pasa con los lentes de una cámara fotográfica, nuestros ojos son capaces de capturar elementos a diferentes distancias: cerca y lejos. Si tu actividad requiere una concentración exclusiva en un objeto, como en el caso de enviar mensajes desde el celular o estar en su computador, se recomienda que cada 15 minutos mires a un lugar más distante para que tus ojos realicen acciones de relajación. Puedes solo girar su cabeza y mirar hacia otro lugar de tu casa u oficina.
Tus lentes son un buen aliado. El uso de lentes medicados o de lectura se hace esencial para estos tiempos. Por lo general, leemos en pantallas con niveles de brillo que pueden afectar nuestra visión si hay una exposición prolongada. Usa tus gafas medicadas cuando estés al frente del computador, veas televisión o revises el celular.
¿Son buenos los lubricantes oculares si uso mucho el computador o el celular? Juan David Bedoya recomienda el uso de las lubricantes solo si la permanencia al frente de las pantallas es por jornadas muy prolongadas. Si no deseas usarlas, recuerda parpadear frecuentemente para lubricar tus ojos y así evitar un sobreesfuerzo.
Di no al cigarrillo. Más tiempo en casa podría generar un poco de ansiedad. La Organización Mundial de la Salud ha asociado la pérdida de la visión con el consumo de tabaco. Puedes cambiar algunos hábitos y evitar sentirte ansioso creando pausas activas mientras estás al frente de una pantalla: como leer un libro, regar tus plantas, escuchar algo de música o ensayando con la meditación.
No te automediques. Los ojos son uno de los órganos más sensibles que tiene nuestro cuerpo. Cada ojo es diferente. No aceptes que otras personas te compartan medicamentos que les recetó su médico personal. Si tienes síntomas de ardor o enrojecimiento y estos no son comunes o duran más de lo normal, consulta directamente a tu médico de confianza.
La comida entra por los ojos. Aunque parece solo un dicho popular, la salud visual y la buena alimentación sí van de la mano. Una dieta balanceada puede hacer que nuestros ojos permanezcan en condiciones sanas durante toda nuestra vida.
Principio fundamental: las manos no van a los ojos. Además de evitar el contagio del virus, las manos son portadoras de una infinidad de agentes infecciosos que podrían irritar tus ojos y generar la aparición de alergias constantes. Mientras estés utilizando dispositivos electrónicos como celular o computador, recuerda hacer un constante lavado de manos y la desinfección de teclados y pantallas.
Con las anteriores recomendaciones procuramos que tus ojos permanezcan con una buena salud, además, siguiéndolas evitarás problemas oculares no solo durante la cuarentena, sino en tus actividades cotidianas una vez retornes a tus espacios habituales.
Dos expertos comparten sus recomendaciones para proteger la salud de las personas que más amamos de agentes infecciosos.
Cuidar a nuestras familias en épocas de aislamiento preventivo, es la mejor forma de demostrar nuestra responsabilidad y afecto. “La principal medida para cuidar la salud de nuestros seres queridos es cumplir, con el mayor rigor posible, el confinamiento, lo que verdaderamente nos va a proteger del contacto con un virus”, afirma Carlos Eduardo Moncada, docente de la Universidad Nacional de Colombia y especialista en el cuidado de la familia.
El experto nos recomienda, a su vez, “afinar y fortalecer las medidas de higiene en el hogar, fundamentalmente el lavado de manos. Hay que añadir a esto que debemos restringir el contacto con familiares, amigos y vecinos que no estén cumpliendo con rigor las medidas dadas por las autoridades”.
El doctor Moncada añade que el miembro asignado para salir de casa, ya sea por cuestiones trabajo, diligencias o compra de víveres, debe seguir un protocolo de limpieza e higiene para no resultar enfermo y, de paso, contagiar a su pareja, a sus hijos y a los adultos mayores que viven con él.
Por otra parte, el experto nos recuerda que, paralela a la higiene, está el cuidar de la salud mental y emocional de todos los miembros de la familia. Para ello debe haber una continua comunicación, respeto por los espacios de intimidad, llegar a acuerdos, expresar solidaridad ante situaciones de dificultad y compartir momentos de diversión.
La doctora Elsy Cristina Sierra Vargas, médica y especialista en medicina interna, nos aconseja que para cuidar a nuestra familia hay que tener una buena alimentación y establecer en casa, si es posible, rutinas de ejercicio tanto para los adultos como para los mayores.
La docente nos recomienda, adicional a las ya citadas, otras medidas para cuidarnos a nosotros mismos y a nuestras familias:
- Lavarnos las manos: debemos hacerlo frecuentemente con agua y jabón por al menos 20 segundos, especialmente después de ir al baño, antes de comer y después de sonarnos la nariz, toser o estornudar.
– Si no contamos con agua y jabón, podemos usar un gel antibacterial que contenga mínimo un 60 % de alcohol.
– Limpiemos y desinfectemos los objetos y las superficies que se tocan con frecuencia, como el celular, el teclado del computador, los interruptores de luz, las perillas de las puertas. Para ello podemos utilizar el hipoclorito de sodio o alcohol antiséptico.
– Cubrámonos la nariz y la boca con un pañuelo desechable al toser o estornudar.
– Quien tenga síntomas respiratorios debe usar mascarilla y evitar el contacto a menos de dos metros con los demás miembros de la familia.
– Para cuidar a los niños, además de las medidas ya citadas, los adultos deben vigilar que los pequeños sí se estén lavando las manos apropiadamente. Debemos, en la medida de los posible, prohibirles que se toquen los ojos, la nariz y la boca. Además, debemos desinfectar, al menos un día por medio, los pisos en donde los niños juegan con frecuencia.
– Para cuidar a los adultos mayores, hay que tener en cuenta dos aspectos: no compartir con ellos artículos de uso personal como platos, vasos, cubiertos o toallas. Algunos miembros de la familia podrían experimentar síntomas leves o no sentir nada, por lo que hay que restar el contacto con el adulto. Y segundo, no recibir visitas, ya que cualquier persona de afuera es potencial portadora de un virus.
– Con las mascotas debemos tener dos cuidados fundamentales: primero, si un miembro de la familia presenta resfriado, lo mejor es que no la toque. Segundo, limpiémosle las patitas luego de haberlo sacado a la calle.
Recordemos que el cuidado de nuestras familias debe ser integral y que debe conjugar la higiene, la buena alimentación, el ejercicio y el tiempo de calidad en conjunto.
Nuestro cuerpo es 60% agua. Así como el planeta necesita que la lluvia llegue hasta los lugares más desérticos, nuestra vitalidad depende en una gran medida del consumo constante de agua, más en tiempos de aislamiento.
Durante la cuarentena que vivimos en diferentes lugares del mundo es posible que olvidemos hidratar constantemente nuestro cuerpo. Juan Bedoya, médico de la Universidad de Antioquia, recomienda ver el agua como uno de los elementos de mayor importancia en nuestro día a día. Estas son algunas recomendaciones que nos hace para no dejar que nuestro organismo tenga sobreesfuerzos por la falta de hidratación:
El agua facilita la respuesta del sistema inmunológico. Es común que el ataque de un virus genere en el organismo alertas como mecanismo de respuesta. Cada vez que nuestro sistema inmunológico responde genera un esfuerzo importante que implica el uso de sus reservas de agua. En caso de deshidratación, por ejemplo, estaríamos enfrentándonos a respuestas lentas y un virus podría ocasionar daños de manera acelerada.
Cuidar nuestros riñones. El consumo frecuente de agua durante largos periodos de aislamiento permitirá que nuestro cuerpo mantenga su funcionamiento normal y esté listo para responder a cualquier ataque.
Remedio para la fiebre. Todos nos imaginamos que la fiebre hace que el cuerpo pierda líquidos y así es. El aumento de la temperatura corporal genera deshidratación. Mantenerse hidratado, también en estos momentos, será de vital importancia.
Para cuidar los músculos. La práctica de ejercicio en casa o el aumento de algunas actividades domésticas pueden representar esfuerzos físicos que antes no hacíamos con frecuencia. Una buena hidratación facilitará la elasticidad de nuestros músculos y evitará lesiones a la hora de levantar un mueble o barrer nuestro hogar.
En casa no puede faltar la ducha. Además de hidratarnos, el agua es fundamental para el aseo personal. No pases ningún día sin darte una ducha y cumplir con todo tu proceso de higiene personal. Activar el cuerpo con un baño también beneficia el cuidado de la piel y evita resequedad o problemas dermatológicos.
Aseo constante del hogar. Usa el agua responsablemente durante tus rutinas de aseo en el hogar. La combinación de agua con algunos productos de limpieza crea ambientes saludables y mantiene protegido cada espacio que habitas.
Agua y entretenimiento. Parece que no tuvieran relación, pero si permaneces mucho tiempo al frente de tu computador o utilizas mucho tu celular, el agua es tu mejor compañía. Mantener hidratado tu cuerpo facilitará la producción de lágrimas que mantendrán lubricados tus ojos mientras te entretienes o trabajas.
Recuerda: Cada día es recomendado tomar entre 2 y 3 litros por día, eso equivale a unos 7 u 8 vasos en promedio. Además, puedes combinar el consumo de agua con algunas frutas y verduras que también le aportan a tu organismo importantes cantidades de líquido.
Estar trabajando desde casa o de manera remota trae consigo múltiples beneficios. Para no estropearlos, es importante estar pendiente de la buena postura, de ejercitarse y de cuidar la salud física en general. Hoy te damos consejos para evitar una de las principales dolencias derivadas de estar todo el tiempo en el computador: el túnel del carpo.
Algunos la llaman enfermedad del túnel carpiano o también es conocida como el trastorno neurológico periférico más común.
Suele aparecer cuando el nervio mediano de la muñeca se comprime por el aumento en la presión de la zona en la que se encuentra. Esta, debido a la flexión y extensión de la muñeca o de los dedos.
La mayoría de las veces este aparece con un dolor punzante en la muñeca o en los dedos, sin embargo, no es la única manera. Este síndrome también puede aparecer a través de un entumecimiento en la mano, debilidad para sostener un elemento, sensación de hormigueo e incluso daño muscular.
En sus inicios, la mayor parte de los pacientes confirma las siguientes afecciones:
No olvides: recuerda hacer pausas activas durante tu jornada laboral para protegerte y cuidar tu cuerpo.